Los vecinos de varias urbanizaciones de Guardamar del Segura vuelven a exigir que el servicio provincial de Costas cumpla su compromiso y ejecute las obras de construcción de una paso elevado para peatones por encima de la Nacional 332. Los afectados de los residenciales del sector urbanístico SUP 6 denuncian que el proyecto está aprobado, aunque se retrasa más de un año. Asimismo remarca una pasarela de acceso a la playa para evitar que el entorno de la pinada se degrade.
Desde la asociación de vecinos del SUP 6 de Guardamar se preguntan por qué no se ha ejecutado todavía la pasarela sostenible de acceso a la playa. Una solicitud de la que llevan años detrás para poder circular con seguridad. y sobre todo, para no dañar las dunas que vienen reclamando desde hace más de un año. Los afectados no entienden cómo «hay una pasarela aérea que cruza la N-332 para ir a la playa y otra al final de la pinada; por ello, es una incongruencia que no se realice una pasarela intermedia entre las dos ya existentes», opinan.
Sobre este proyecto aseguran que se demandó por parte del Ayuntamiento guardamarenco, se autorizó por la Conselleria de Medio Ambiento y «lo aprobaron y se comprometieron los responsables de Costas». Desde este colectivo vecinal se recuerda que el pasado año no se pudo llevar a cabo la creación del acceso a la playa porque Costas «alegó no tener empresa para su ejecución». Sin embargo, los residentes de esta parte algo más alejada de la primera línea de playa aseguran que «este año sabemos que sí que hay empresa, pero nos están dando excusas que no nos convencen».
Sostienen de este modo que «el caso es que llevamos un año en espera de la realización de la pasarela como se comprometieron con el SUP 6». Ahora la falta de esta infraestructura se nota más todavía debido a que con la llegada del calor las visitas a la zona de baño son más frecuentes. Mientras esperan a que se haga efectiva la solución prometida en el acceso a la playa, estos vecinos han creado en la pinada una pasarela casera. Para hacer más fácil su tránsito hacia el mar los denunciantes han colocado alfombras para suavizar sus pisadas. En este sentido la asociación que agrupa a las urbanizaciones La Laguna, Larrosa y Pórtico Mediterráneo, Moncayo y Las Rosas, recuerda que las consecuencias de no tener este paso peatonal «es la destrucción parcial del ecosistema de la pinada por la presión del tráfico incontrolado de bicis y motos de cuatro ruedas y el pisoteo de personas». Durante épocas estivales aseguran que a diario circulan por las dunas más de mil familias.
Así las cosas, los vecinos que componen la agrupación manifiestan que «estamos bastante discriminados porque hemos visto realizadas pasarelas solicitadas por el Ayuntamiento con mucho menos paso de personas que las que se dirigen a la playa de nuestra zona».
jueves, 26 de mayo de 2011
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