Estupor e incertidumbre ante un expediente de regulación de empleo (ERE). La principal industria de Guardamar del Segura no aguanta la crisis económica y ha propuesto a sus empleados que reduzcan las horas de trabajo al mes, algo que llevaría a una disminución en los sueldos y a una delicada situación para 300 familias guardamarencas.
La firma norteamericana Johnson Controls se ha visto afectada por la recesión económica y antes del mes de diciembre ajustará los turnos de los operarios de baterías a su producción, que ha decrecido en el último año hasta un 22 por ciento a pesar de que nutre gran parte del mercado europeo, según confirman fuentes cercanas a la empresa.
La economía local se estremece ante la posibilidad que el ERE de esta industria conlleve posteriores despidos. A la grave situación del mercado inmobiliario, donde hace más de un año que no se comienzan nuevas promociones, se encontraba el comercio local que realiza verdaderos malabarismo para sobrevivir en invierno. La agricultura y la pesca son dos sectores estancados en donde no se ofrecen ningún puesto de trabajo y se tambalean desde hace años. El único sector que se mantenía enérgico era la industria pero ahora la principal fábrica del municipio se encuentra en un momento crítico.
De los 317 empleados de Jhonson Controls, empresa que realiza las baterías Varta, se verán afectados un total de 287, ya que los operarios que se encuentran en segunda actividad no se verán perjudicados por el expediente. En este caso los sueldos bajarían en un gran porcentaje incluso en un 25 por ciento menos.
La fábrica de Guardamar confecciona al año más de 6,8 millones de baterías y en el último año fiscal del 2008 la creación bajó hasta 5,1 millones de piezas. La marca opera con dos sedes en España una en Burgos para batería de automóviles y la de la Vega Baja que está destinada a la reposición para el mercado europeo.
La caída de la producción junto a la estacionalidad del producto, que fluctúa en periodos de alta y baja demanda. El descenso en la demanda de baterías en Europa ha llegado a que el desfase entre la producciones planificadas y las previstas sea de 1.180.000 baterías, casi un cuarto de la producción total.
Por este motivo la dirección de la filial Johnson Controls negocia con el comité de empresa una adaptación a la nueva situación productiva.
En principio la empresa ha ofrecido una continuidad en la actividad productiva con el fin de asegurar la viabilidad del centro y del empleo de sus trabajadores. Para ello, ha suspendido todos los contratos temporales y ha puesto en marcha el expediente de regulación de empleo. La gerencia ofrece que el próximo mes de diciembre y hasta junio del 2009 se paralice toda la actividad productiva durante 40 días laborales y 56 días naturales. Esta fórmula lleva a que cada trabajador esté parado una semana cada mes, lo que afecta al sueldo base a pesar de tener extras por nocturnidad y peligrosidad.
Los trabajadores mediante el comité de empresa negocian que el nivel de las retribuciones sea similar al que cobraría cada operario si se encontrase en baja laboral. En cualquier caso para la firma de baterías es la segunda vez que se enfrenta a una regulación de empleo ya que a mediados de los años noventa hubo otra periodo similar. En esta ocasión la regulación fue más interior y la mayorías de trabajadores no vieron afectados sus emolumentos.
Este medio se quiso poner en contacto con la gerencia de la empresa que rehusó realizar valoraciones al respecto.
Diario La Verdad 26/11/08
miércoles, 26 de noviembre de 2008
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1 comentario:
非常好东西。
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